"Osotu, un colegio que me cambio la vida, una de las mejores etapas de mi vida la cual no cambiaría por nada. Es un colegio en el que te escuchan, te valoran, te ayudan y te aconsejan, lo cual esta genial para personas como yo que lo han pasado mal en otros colegios y por eso y por muchas más razones quiero que permanezca abierto. A mi me queda un año, pero hay muchos peques que aun están por vivir todos esos años que yo vivi en osutu. Hay muchos peques por los que merece estar abierto. Si me preguntaras a mi yo diría que Osotu fue la luz que acabo con mi oscuridad, el sitio que después de tanto tiempo, me saco una sonrisa, el centro que me hizo entender y amar las matemáticas como nunca antes lo había hecho. Fue el centro que me ayudo a seguir adelante y para mi eso es algo que nunca pensé que ocurriría. Ahora que ha ocurrido me gustaría que otros peques pudieran sentirlo igual que yo por eso, como en Osotu en ningún centro. Antes de ir a Osotu, yo me sentía sola y tonta, pero fue entrar en Osotu y darme cuenta que no estaba sola y que podía conseguir todo lo que me propondría. Me sentí como en un sueño que muchos niños quieren y que en Osotu se pueden cumplir."

Somos cinco alumnos de 4º de la ESO del colegio Osotu Lanbarri, un lugar muy importante para nosotros, y os escribimos para contaros algo. Queremos que sepáis lo que pensamos, que nos escuchéis, porque somos los estudiantes a los que más afecta que no nos apoyen desde las instituciones. Este año, el Gobierno Vasco ha decidido no darnos la ayuda económica que antes permitía que nuestro cole siguiera adelante. Para nosotros, esto va más allá del dinero: es como si nos quitaran el sitio donde hemos aprendido quiénes somos, donde nos han enseñado a confiar en nosotros mismos, a respetar a los demás y a sentirnos arropados al estudiar. En Osotu, no somos solo números. Aquí nos valoran por lo que somos, nos escuchan y nos respetan de verdad. Muchos venimos de otros colegios donde no nos sentíamos a gusto. Aquí, en cambio, hemos encontrado una forma de aprender que se adapta a nosotros, no al revés. Es una educación que nos ayuda a crecer con confianza, ganas y motivación. Si Osotu Lanbarri cerrara, no solo nos afectaría a nosotros, sino sobre todo a muchos compañeros con problemas de aprendizaje, que aquí han encontrado un sitio donde por fin los entienden y los tratan bien y con paciencia. En este colegio, adaptan las clases a cada uno, nos enseñan a manejar nuestras emociones y nos ayudan en todo momento. Para muchos de ellos, perder este centro sería como quedarse sin ninguna otra opción. Sin esta ayuda, podrían volver a sentirse solos, incomprendidos y fuera del sistema escolar. Sabemos que nuestro colegio es especial. Y creemos que por eso mismo merece la pena apoyarlo: porque ayuda a estudiantes que, como nosotros, no encajábamos en los colegios de siempre. Porque de verdad se preocupan por la diversidad. Y porque demuestran que otra forma de educar no solo es posible, sino que hace falta. Os pedimos que penséis bien lo que vais a hacer y que escuchéis lo importante que es para nosotros no perder esta oportunidad. No hablamos solo de un colegio. Hablamos de lo que estamos viviendo ahora y de lo que queremos para el futuro. Gracias por leernos y por tener en cuenta lo que sentimos.